Entre barcitos de pintxos y una fama vitivinícola muy bien ganada, Logroño es una de las ciudades más bonitas de la comunidad autónoma de La Rioja, en el norte de España. Con unos 150.000 habitantes y atravesada por el Río Ebro, tiene un casco antiguo perfectamente conservado, hermosos parques y es uno de los puntos de paso del Camino de Santiago francés. Logroño fue elegida varias veces como capital gastronómica española y también es considerada una de las ciudades con mayor calidad de vida del país. Entre sus atractivos destacan: la Concatedral, el casco antiguo, la Muralla de Revellín, la calle Portales, el Puente de Piedra, la calle Laurel y la visita a alguna de sus bodegas tradicionales.
Conoce todos los sitios que ver en Logroño
Si estás decidido a visitar esta bonita ciudad de La Rioja, te recomendamos leer este artículo donde vas a conocer los mejores lugares que ver en Logroño.
Catedral de Logroño
Uno de los primeros sitios que ver en Logroño es la Concatedral de Logroño, fue construida en el siglo XV, con ampliaciones y reformas durante los siglos XVII y XVIII. Está ubicada entre la calle Portales y la Plaza del Mercado. Su fachada es imponente pero su interior es de una belleza aún mayor, con su hermosa Capilla de Nuestra Señora de la Paz; el coro y el retablo también son impactantes, aunque algunos ingresan al recinto sólo para admirar un óleo llamado «El calvario de la Rioja«, atribuido al gran Miguel Ángel.
Casco antiguo
Saliendo de la Concatedral, se puede seguir por la calle Caballerías en dirección al casco antiguo, con sus edificios, palacios e iglesias, como la Iglesia de San Bartolomé, la más antigua de la ciudad y que sin duda es un lugar recomendado que ver en Logroño. Destacan también el Palacio de los Chapiteles y la Iglesia de Santa María de Palacio, cuyo sobrenombre es «La Aguja«, construida en el siglo XIII.
Durante el día, un respetuoso silencio se instala en estas calles adoquinadas -como la famosa calle Ruavieja, Herrerías y del Marqués de San Nicolás– y llenas de historia, mientras que por la noche el bullicio se apodera de ellas y tanto locales como turistas salen a disfrutar los bares de pintxos y el ambiente joven.
Calle Portales
La calle Portales es uno de los sitios emblemáticos de Logroño. Ubicada en el casco antiguo, su nombre describe los soportales que se despliegan en la parte sur de esta arteria, que concentra comercios y terrazas. También en la calle Portales -justo al comienzo- se encuentra el llamativo Palacio de los Chapiteles (en donde funcionó el Ayuntamiento durante más de un siglo), que data de mediados del siglo XVI, y el Convento de la Merced, sobre el final de la calle. Tanto el Palacio de los Chapiteles como el Convento de la Merced deberían estar en tu lista de sitios que ver en Logroño.
Muralla del Revellín
La Muralla de Revellín es ni más ni menos que lo que queda de las antiguas fortificaciones de Logroño. Entre 1498 y 1540 la ciudad tuvo una gran muralla medieval que sirvió para defender el pueblo del asedio de las tropas franco-navarras, comandadas por el general Asparrot a mediados del siglo XVI y es otro de los lugares atractivos que ver en Logroño. La llamada Puerta de Revellín, en el acceso oeste a la muralla, es la única que permanece en pie.
Puente de Piedra
Cuatro puentes surcan el río Ebro en su serpenteo por la ciudad de Logroño. El más famoso es el Puente de Piedra o Puente de San Juan de Ortega, cuya construcción se realizó en 1884, aunque se cree que anteriormente existió uno más pequeño que se remonta al siglo XI. El puente tiene casi 200 metros de largo y siete arcos; su importancia reside en que es la vía de entrada a Logroño del Camino de Santiago y sin duda es uno de los sitios que ver en Logroño. El espectáculo de miles de peregrinos desfilando día a día por el puente, desde tiempos inmemoriales, es una manifestación de fe que siempre resulta emocionante.
Parque del Ebro
Al cruzar el Puente de Piedra se llega al bellísimo Parque del Ebro, sobre el margen derecho del río. Se trata del gran pulmón verde de Logroño (con 150.000 metros cuadrados), que tiene varios parques y paseos muy bonitos como el del Espolón, el parque del Carmen, el de la Ribera y la Plaza de Santiago. Todos los días, locales y turistas hacen picnics al aire libre en esta zona, en donde destacan cuatro pequeños molinos con los colores de La Rioja, ubicados junto al Puente de Piedra.
Calle Laurel
La calle del Laurel, muy cerca de la Concatedral y el Paseo del Espolón, es la más famosa de Logroño a la hora de ir de tapas (aquí les dicen pintxos) por la ciudad, ya que en 200 metros concentra más de 65 restaurantes y bares. Además de la oferta gastronómica para disfrutar cuando cae el sol, durante el día se instala en el inicio de esta calle el pintoresco Mercado de San Blas, en donde se venden los mejores embutidos y quesos riojanos.
Calle Ruavieja
La calle más antigua de Logroño es Ruavieja y por ella transitan los peregrinos que siguen el Camino de Santiago. En estas aceras se ubicaron durante siglos las antiguas bodegas y calados riojanos, entre los que destacan la Bodega de la Virgen, en la llamada Casa de la Virgen, que data del siglo XVI. Todavía subsisten el calado Reja Dorada y el de San Gregorio. Una curiosidad es que en la calle Ruavieja se filmó en 2009 una película llamada El Camino, con el actor Martin Sheen.
Visita a las bodegas riojanas
La comunidad autónoma de La Rioja es una zona emblemática para el enoturismo en España. A cuarenta minutos en coche desde Logroño se encuentra la pequeña localidad de Vivanco, con su célebre Museo Vivanco de la Cultura del Vino, en donde se puede aprender todo sobre los caldos de la región. También se recomienda visitar las distintas bodegas, como las de Ontañón, Rioja Vega, Viña Ijalba y las Bodegas Franco-Españolas, entre las más conocidas.
Resumen de cosas que ver en Logroño
- Catedral de Logroño
- Casco antiguo
- Muralla del Revellín
- Calle Portales
- Puente de piedra
- Parque del Ebro
- Calle Laurel
- Calle Ruavieja
- Visita a las bodegas riojanas