Ubicada al borde del Mediterráneo, con sus casas pintadas de blanco en contraste con el mar azul, la ciudad de Altea es un pequeño puerto pesquero con un hermoso casco antiguo, ideal para desconectarse por unos días en uno de los destinos con más encanto de la Costa Blanca española. Este pueblo español de la provincia de Alicante, en el que viven unas 23.000 personas, cuenta con seis kilómetros de pacíficas playas de guijarros, que se intercalan entre grandes acantilados. Durante siglos, Altea ha sido refugio e inspiración de poetas, músicos y artistas plásticos. Actualmente, sigue teniendo esa mística bohemia y varios atractivos que vale la pena descubrir; entre ellos: el paseo marítimo, la Iglesia Ortodoxa, la Plaza del Ayuntamiento, el Templo del Arcángel y el fantástico Mirador de los Cronistas.
Entérate de los mejores lugares que ver en Altea en tus vacaciones
Gracias a nuestro artículo vas a tener la oportunidad de elaborar un itinerario con los mejores sitios que ver en Altea:
Casco antiguo
Uno de los primeros sitios que ver en Altea son las calles empedradas del casco antiguo que parecen de juguete, con sus coquetas casas blancas de tejas azules y pequeñas plazas como la de La Cruz y de L’Aigua. En ascenso por estas calles en desnivel se llega a la Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, también conocida como La Cúpula del Mediterráneo. Es el templo religioso más importante de Altea y resulta inconfundible por sus dos cúpulas azules. La alternancia de los colores blanco y azul dan la sensación de estar paseando en una isla griega que bien podría ser Mykonos o Santorini.
Durante el verano, esta parte alta de la ciudad -desde donde se logran las mejores vistas de Altea– se convierte en un simpático mercado de artesanos. Regresando del casco antiguo, en camino al paseo marítimo, se pasa por la Plaza del Ayuntamiento, el sitio en donde alteanos y turistas se sientan a tomar café y hacen un descanso en sus rutinas.
Paseo marítimo
Otro de los lugares que ver en Altea es tanto el paseo marítimo como el puerto son símbolos de Altea y recuerdan su pasado como importante polo pesquero durante el siglo XVIII. Hoy esta zona regala un contraste entre su aspecto de puerto moderno, en el que amarran lujosas embarcaciones, y la postal de los pequeños barcos pesqueros que regresan todas las tardes del mar cuando cae el sol. En el paseo marítimo, que va desde el puerto hasta el viejo pueblo de pescadores, se ubican los mejores restaurantes, cafeterías y bares de la ciudad. Durante el verano, las terrazas se llenan de turistas y un mercado callejero que da vida al lugar.
Templo del Arcángel
Construida con madera y con cuatro llamativas cúpulas azules y doradas, el Templo del Arcángel Miguel fue la primera iglesia ortodoxa rusa edificada en territorio español y es otro de los sitios que ver en Altea. Todos los materiales que se utilizaron para levantar este templo (réplica de una iglesia rusa del siglo XVII) fueron traídos especialmente desde la región de los Montes Urales.
Playas de Altea
Altea ofrece un abanico de bellísimas playas, con las aguas cristalinas del Mediterráneo como telón de fondo. Las playas céntricas o aledañas al casco urbano, como la Escollera y la Playa de la Roda, tienen su encanto: son muy relajadas y, aunque resultan bastante concurridas, nunca desbordan de turistas. Pero las más bonitas son las calas escondidas entre los grandes acantilados, como Solsida, Cap Negret, Cap Blanch, Mascarat, L’ Espigó y la Olla. Justamente, en esta última playa se celebra cada 10 de agosto el Castell de l’Olla y miles de personas se juntan en la costa para disfrutar de un magnífico espectáculo de fuegos artificiales.
Mirador de los Cronistas
Altea tiene varios miradores muy bonitos: uno de ellos es el Mirador de la Plaza de la Iglesia, que regala una gran vista nocturna de la ciudad iluminada. Otro de los más concurridos y sitios que ver en Altea es el Mirador de los Cronistas, desde donde se puede observar la bahía y el entorno del Parque Natural de la Sierra Helada, hogar de acantilados de 300 metros y del fabuloso Peñón de Ifach.
La Mostra d’Artesania
Durante Semana Santa y los meses de verano (julio, agosto y la primera semana de septiembre) se realiza desde hace casi cuatro décadas la Mostra d’Artesania de Altea, un mercado de artesanos que se instala en la Plaza de la Iglesia. En esos días, los 18 mejores artesanos de toda España se dan cita en la ciudad para mostrar sus últimas creaciones.
Jardín de los Sentidos
Uno de los secretos mejor guardados de Altea es el Jardín de los Sentidos. No todos conocen este pequeño paraíso con plantas traídas de los cinco continentes. Es un espacio que por momentos parece un edén tropical y da la sensación de estar en Río de Janeiro o en algún paraje selvático del sudeste asiático y sin duda debería estar en tu lista de lugares que ver en Altea. Aquí funciona una de las casas de té más conocidas de Altea.
Museo del Mar
El Museo del Mar no es uno de los sitios más conocidos de Altea pero visitarlo es un muy buen plan. Ubicado en el antiguo astillero Orozco, este museo se creó para explicar el vínculo potente que une a los alteanos con el Mar Mediterráneo. Se exponen viejas fotos de embarcaciones, artilugios de pesca y hasta una reproducción muy fiel del malogrado Titanic.
Caminos de Altea
Para quienes quieran recorrer los alrededores de Altea, aquí se despliegan las mejores rutas de senderismo de la región. En primer lugar, a 20 kilómetros de la ciudad, se encuentra el camino de las Fuentes de Algar, un sendero de dos kilómetros que transcurre junto al río Algar, con hermosas cascadas para disfrutar en familia. Otras rutas son las del Faro de Albir, de unos cinco kilómetros, que permite visitar la Cueva de la Balena; y la del Penón de Ifach, con sus 332 metros de altura y las mejores vistas sobre el Mediterráneo.
Resumen de cosas que ver en Altea
- Casco antiguo
- Paseo marítimo
- Templo del Arcángel
- Playas de Altea
- Mirador de los Cronistas
- Mostra d’Artesania
- Jardín de los Sentidos
- Caminos de Altea