El Principado de Mónaco es el segundo país más pequeño del mundo -después del Vaticano- y concentra en su escaso territorio más lujo y glamour que en cualquier otro lugar del planeta. Alcanza con detenerse unos minutos frente al Casino de Montecarlo -al que sus propios ciudadanos tienen prohibida la entrada- para fascinarse con los magníficos autos de lujo aparcados junto a esta joya suntuosa de la Belle Epoque. En Mónaco viven apenas 38.000 personas, en un país que concentra el mayor número de millonarios por cantidad de habitantes (13.400, para ser exactos, casi un tercio de su población). Entre los principales atractivos de este legendario paraíso fiscal figuran: el Palacio del Príncipe, la Playa Larvotto, el Puerto Hércules, la Catedral y el Museo Oceanográfico.
Descubre los lugares más espectaculares que ver en Mónaco
Casco histórico Le Rocher
Le Rocher –La roca, en español- es el casco histórico de Mónaco y uno de sus lugares emblemáticos que ver en Mónaco. Ubicado literalmente sobre la cima de una gran formación rocosa, esta zona de angostas calles medievales, conocida como Mónaco Ville, concentra sitios encantadores, como la Placette Bosio, la Place Saint Nicolas, el Palacio de Justicia, la Capilla de la Misericordia y la hermosa Catedral.
Es un muy buen plan llegar a la Plaza del Palacio a las 11.55 exactas, para presenciar el relevo de la Guardia de los Carabineros, en el Palacio del Príncipe. En la zona de Le Rocher se ubican también los Jardines de San Martín y el Museo Oceanográfico, uno de los más famosos del mundo. Para subir hasta Le Rocher se pueden tomar distintas escalinatas, pero la más cómoda es la que comienza su recorrido en la Plaza de las Armas, a la altura del puerto, a través de Rampe Major.
Museo Oceanográfico
Ubicado en la cima de Le Rocher, en el casco antiguo, se ubica el Museo Oceanográfico, uno de los sitios imperdibles que ver en Mónaco. Su imponente fachada se erige sobre un acantilado que oficia de gigantesco balcón sobre el Mediterráneo. Contiene tres acuarios: uno mediterráneo, uno tropical y una laguna de tiburones.
Este museo, inaugurado en 1910, demoró más de una década en ser construido y alberga cerca de 6.000 especies de peces y 200 familias de invertebrados, desde rayas hasta tiburones, caballitos de mar, medusas y tortugas. Uno de sus directores más importantes fue, durante la década del 60, el famoso oceanógrafo Jacques Cousteau. La entrada cuesta 16 euros.
Palacio del Príncipe
Otro de los famosos lugares que ver en Mónaco es el Palacio del Príncipe de Mónaco. Se construyó en 1191, en la cima de una formación rocosa que vigila el mar, en tiempos en que el territorio formaba parte de la República de Génova. Este palacio fue tomado por asalto a fines del siglo XIII por la aristocrática familia Grimaldi, que se instaló allí durante siglos pese a los ataques sucesivos de franceses, italianos e ingleses.
Durante los primeros años del siglo XX, el Palacio y los Grimaldi fueron un símbolo de lujo y decadencia, con vetas cinematográficas, cuando la actriz norteamericana Grace Kelly se erigió en Princesa de Mónaco al casarse con el príncipe Rainiero III. Los hijos del matrimonio, Carolina, Alberto y Estefanía, han ocupado durante décadas las tapas de las revistas de la llamada prensa rosa. Actualmente, el palacio es la residencia del príncipe Alberto II, actual soberano de Mónaco.
Ingresar al Palacio es toda una experiencia, ya que las habitaciones son dignas de reyes, con el antiguo mobiliario, salones de estilo rococó y los muros cubiertos de fina seda. El precio de acceso es de 8 euros o de 11,50 euros si la visita incluye conocer la colección de autos privados del palacio, en la que se lucen los fantásticos Rolls Royce, Ferrari, Alfa Romeo, Lamborghini y Maserati, entre otras marcas de lujo.
Puerto Hércules
En el distrito de La Condamine se ubica el famoso Puerto Hércules, el más exclusivo de Europa y otro de los lugares espectaculares que ver en Mónaco. Este complejo se extiende a lo largo de 40 hectáreas y sus amarras dan refugio a unas 700 embarcaciones, muchas de las cuales son fantásticos palacios flotantes. Se recomienda dar un paseo por los muelles para deleitarse con los yates de súper lujo.
Para tener una idea de los valores que se manejan en el Puerto Hércules, amarrar un yate de 125 metros de eslora durante la semana que dura el Gran Premio de Fórmula Uno de Mónaco cuesta 142.000 euros (con IVA incluido!).
Casino de Montecarlo
El legendario Casino de Montecarlo es un ícono para los jugadores de los cinco continentes y una de las grandes atracciones que ver en Mónaco. Fue inaugurado en 1856 y su arquitecto, Charles Garnier, es el mismo que creó la Ópera de París.
Un dato importante es que el juego se legalizó en Mónaco en 1854 (pese a que en sus países vecinos estaba prohibido). Se dice que el casino fue la salvación de la familia Grimaldi, ya que pudo aportar los ingresos necesarios para salvar a la entonces ruinosa economía monegasca. El casino saltó a la fama en 1983 cuando fue el escenario de una de las películas de James Bond (Never say never again).
No es necesario que uno sea aficionado al juego para visitar el Casino de Montecarlo. El edificio es de una belleza extraordinaria y se puede recorrer durante el día. Este edificio y el Hotel de París (que se ubica al lado del casino) concentran la mayor cantidad de autos de lujo que uno verá en su vida.
Playa Larvotto
La Playa Larvotto es el balneario más importante que ver en Mónaco. Estas aguas azules y sus arenas blancas escoltan la Avenida Princesse Grace, que muchos consideran la calle más cara del mundo. Larvotto está formada por dos bahías consecutivas, a lo largo de 400 metros, en donde algunas áreas son públicas y otras privadas.
Pese a ser una playa céntrica, Larvotto es una zona tranquila para relajarse, zambullirse y hacer snorkel en las aguas cálidas del Mediterráneo. Quienes quieran almorzar al borde del mar, se recomienda que no acudan a los restaurantes de la Avenida Princesse Grace, ya que los precios son exorbitantes (lo mejor es comprar comida en otro barrio y llevarla a la playa).
Catedral de Mónaco
Uno de los lugares históricos que ver en Mónaco es su Catedral, fue terminada en 1903 y yace sobre la primera iglesia parroquial de la ciudad, construida durante el siglo XIII. Su gran fachada es de un cuidado estilo neorrománico y en su interior destaca el retablo de San Nicolás que pintó Ludovicco Brea, un renombrado artista italiano del Renacimiento.
Una de las curiosidades de la catedral es que se encuentran las sepulturas del príncipe Rianiero III y su esposa, la actriz norteamericana Grace Kelly, quien falleció en un accidente automovilístico en 1984. Es muy común que los turistas se amontonen frente a la tumba de Grace de Mónaco. La estrella de Hollywood y el príncipe se casaron en esta catedral el 19 de abril de 1956, en lo que fue una de las bodas más recordadas del siglo XX.
Circuito de Fórmula Uno
A sólo 100 metros del Casino de Montecarlo se encuentra la Curva Loews, uno de los puntos más álgidos del circuito de Fórmula Uno del Gran Premio de Mónaco. Esta curva, ubicada frente al hotel Fairmont (previa a la entrada al túnel que pasa bajo el hotel Loews), es temida por pilotos de todo el mundo, y resulta también un gran punto de interés turístico. Se trata de la única carrera del circuito que se corre en las calles de una ciudad, durante la última semana de mayo.
El GP de Montecarlo es una de las citas más prestigiosas y antiguas del automovilismo mundial. Aquí se realizaron carreras épicas, que vieron coronarse a íconos de todos los tiempos, como Niki Lauda, Alain Prost, Ayrton Senna, Michael Schumacher y Lewis Hamilton, quien ganó la edición de 2019.
Jardín exótico
El llamado Jardín exótico es un espacio de 15.000 metros cuadrados que tapiza la falda del acantilado de Le Rocher. Es un lugar simplemente mágico que ver en Mónaco, con miles de plantas exóticas de los cinco continentes. Aquí se encuentra la colección de cactus más importante del mundo. Algunas de las especies fueron plantadas por el mismísimo Príncipe Alberto I, quien proyectó el jardín botánico hace más de medio siglo.
Dentro mismo del Jardín exótico se puede visitar una misteriosa gruta prehistórica que penetra 60 metros en la profundidad del acantilado. La entrada al parque, que incluye el recorrido por la gruta y el ingreso al Museo de Antropología Prehistórica, tiene un costo de 7,40 euros.
Mercado de la Condamine
El Mercado de la Condamine se ubica en la Plaza de las Armas y funciona desde 1880. Visitarlo es descubrir que los habitantes de Mónaco, por más millonarios que sean, también hacen sus compras de vez en cuando. Es un mercado muy simpático, con unos veinte puestos de productores locales, entre horticultores, floristas, panaderos, carniceros y vendedores de pescado.
Iglesia de San Carlos
Jardín Japonés
Resumen de lugares inolvidables que ver en Mónaco
- Casco histórico Le Rocher
- Palacio del Príncipe
- Puerto Hércules
- Casino de Montecarlo
- Playa Larvotto
- Museo Oceanográfico
- Catedral de Mónaco
- Circuito de Fórmula Uno
- Jardín San Martín
- Mercado de la Condamine